La falta de amor propio, el que la persona no se sienta valiosa y que dude en todo momento de tus decisiones, el que no se acepte tal y como es, que en todo momento se está criticando, son características de una persona con autoestima baja, mismas características pueden causar depresión, haciéndose así un círculo vicioso, baja autoestima se traduce en depresión y depresión en baja autoestima.
Según la Organización Mundial de la Salud:
La depresión es un trastorno mental frecuente, que se caracteriza por la presencia de tristeza, pérdida de interés o placer, sentimientos de culpa o falta de autoestima, trastornos del sueño o del apetito, sensación de cansancio y falta de concentración.
“Me siento cansada, no tengo ganas de nada, sólo quiero quedarme en mi cama, ni ganas de asearme me dan, siento un gran vacío en mi pecho, a cada rato tengo ganas de llorar y no sé por qué, aún con todas mis responsabilidades, no logro animarme ni un poco, no me emociona ni mis hijos, ni mi hogar, nada, no sé qué hacer”
“Tengo pensamientos negativos de mí, de mi vida y de mi futuro, creo que los demás me engañan y que no quieren estar en contacto conmigo, de seguro les caigo mal, soy una mala persona”.
“Me siento muy sola aunque este rodeada de gente, siento que no encajo en ningún lugar, todo me parece tan vacío, tan extraño, me siento como el patito feo del cuento”
“Siento que la vida no tiene sentido, nada ni mi familia, ni mis amigas, ¿qué de bueno tiene la vida? No hay nada para mí, veo todo de color gris, sin sentido, sin anhelo, sin ganas de nada”
Estos son comentarios muy recurrentes en personas que están pasando por un episodio de depresión, no entienden qué les pasa, no saben que están cursándolo, menos saben de qué nivel es el grado en el que se encuentra su enfermedad.
Para determinar que una persona está deprimida, debe presentar los cuadros de emociones negativos y pensamientos catastróficos por varios días consecutivos e incluso semanas, todos en algún momento de nuestra vida podemos tener desgano y pensamientos derrotistas y negativos, lo importante aquí es revisar el periodo en el cual los pensamientos son repetidos, los cuales pasan de ser una emoción pasajera a un estado de ánimo que transcurre en el tiempo.
Causas de la depresión
Existen factores psicológicos, biológicos y ambientales en la aparición de la depresión los cuales pueden ser:
Factores genéticos que alguien de la familia como los padres tenga propensión a la depresión
Factores biológicos, cambios hormonales en las mujeres en el embarazo y parto y en general falta de generación en el organismo de serotonina, llamada la hormona de la felicidad.
Factores sociales, detonados por problemas en el trabajo, en la casa, una ruptura amorosa, divorcio. Las mujeres son más propensas a vivir situaciones de estrés y depresión pues en ellas recae el cuidado de enfermos, niños y ancianos, aunado a esto, generalmente el empobrecimiento y la falta de oportunidades laborales que contribuyen a aumentar la sensación de desprotección y con ello el aumento de depresión y por consiguiente baja autoestima y amor propio.
Debido a la complejidad de la personalidad humana, la depresión y autoestima, están ligadas entre sí, ya que la presencia de depresión en la vida impide a la persona a relacionarse en el ámbito social saludablemente, trayendo consigo, generalmente el aislamiento, provocando así una pérdida de la confianza en su valía personal y con ello, baja autoestima.
Cuando la presencia de depresión es primaria, o se presenta como un hecho aislado, puede llegarse a la solución de los conflictos de manera rápida y eficaz, pues algunas personas pueden afrontar bien situaciones difíciles y seguir avanzando, otras pueden quedarse en ese sitio de desesperanza por meses, incluso años, es ahí en donde la autoestima se ve minimizada, haciendo de la depresión un conflicto serio que hay que atender.
Algunas manifestaciones de las personas con depresión que pueden conducir a una baja autoestima son las siguientes:
A menudo parecen ser perezosos o simplemente holgazanean en su entorno, les resulta difícil ir a trabajar porque siente algún tipo de enfermedad.
Inestabilidad emocional, las emociones cambian drásticamente, fuertes emociones negativas, como disminución de la motivación, estado de ánimo deprimido y culpa.
Sensibilidad a las palabras, los altibajos de las emociones se intensifican debido a acciones, palabras, y pensamientos que suelen ser castigadores e impulsivos, generalmente provocados por su propia mente.
Otra peculiaridad es que tienen una fuerte negación hacia el reconocimiento de sus propios logros, sintiéndose inmerecedor de halagos, ya que si algo le sale bien lo atribuye a la casualidad o a la suerte.
La depresión puede ser tratada con terapias conductuales, ejercicios especializados, cursos y talleres que ayuden a elevar la autoestima, ya que al estar la persona deprimida en un ambiente de mayor aceptación y amor propio, puede eliminar los rasgos depresivos.
Cuando se trata de una depresión aguda, quiere decir, que ha estado manifestada en la persona por meses y años, se deberá recurrir a clínicas u hospitales, ya que en estos casos puede ser requerida medicación y tratamientos psiquiátrico específico para cada paciente, aunque se ha demostrado que la terapia conductual ha sido eficaz también en casos de depresión graves, con el uso de cursos, talleres y ejercicios de autoconocimiento.
consequat.
Cómo tratar una depresión y con ello mejorar tú autoestima
- Ponte metas realistas, si te llenas de actividades, compromisos y tareas, puedes obtener como resultado estrés y fatiga, ya que al ir acumulando metas no cumplidas, generaras tensión y con ello una sensación de incapacidad por no lograr las metas propuestas.
- Cuando no logres una meta, quizás sea tiempo de analizar si es algo que en verdad quieres lograr o solo está ocupando un espacio en tu mente, es válido cambiar de metas y objetivos y eliminar aquello que esta fuera de tu alcance o que ya no quieres conseguir.
- Un descanso adecuado, los adultos requieren dormir de 6 a 8 horas seguidas equilibrará la mente y descansara tu cuerpo, mejorando tu estado de ánimo, si tomas un baño de agua tibia antes, mejor.
- Dejar de culparte por lo que se hizo en el pasado o se dejó de hacer, las personas que se quedan ancladas en el pasado les es imposible avanzar, vayamos a otra rosa mariposa.
- Dejar de vivir pensando en el futuro y si te tocará pensión o en dónde vas a trabajar o que pasará con el planeta y el calentamiento global también es una buena idea.
Preocuparse en exceso por situaciones que están lejos de nuestro alcance es una forma fácil de lograr ansiedad, mejor dejemos la preocupación para las abuelas y usar el tiempo para ocuparse de lo que sí se pueda hacer, tener buenas notas, estudiar algo nuevo, hacer bien el trabajo, cuidar la salud haciendo ejercicio y alimentándonos sanamente es una mejor idea que andar viendo el mundo y sus fallas.
Si las personas con las que vives o que te rodean y sus actitudes te provocan sentimientos de incomodidad y tristeza, quizás sea tiempo de mirar a los lados y ver si puedes reunirte con alguien más, muy posiblemente eliminarás tu estrés y aumentarás tu autoestima con un cambio de escenario y personajes, se vale intentarlo.
Cuando sientas que el espacio te ahoga, una larga caminata observando el paisaje te puede ayudar a despejar tu mente, ejercitas tu cuerpo y te distraes, cambiando con el entorno también tu estado de ánimo.
Come lo que te gusta, mira algún programa divertido que te haga llorar pero de risa, escucha tu música favorita, pero eso sí, nada de corta-venas, esas dan más tristeza y en vez de ayudar, empeoran las emociones.
El aceptarse tal y como se es, es una base sólida para mantener el amor propio, con ello no quiere decir que nos convirtamos en una persona conformista y digamos así soy y así me moriré, cambiamos lo que podamos cambiar, más aceptar que no nacimos Lady Di o Brad Pitt es un buen inicio.
Conocernos en lo más profundo de nuestro ser al que podamos sumergirnos, descubriendo nuestros gustos, nuestros disgustos, con que te emocionas y con qué reaccionas alegre, con que te enojas, cuáles son tus pensamientos, aunque no sean muy blancos forman parte de ti y el conocerlos te dará herramientas para cambiarlos si así lo decides.
Cree que mereces todo lo bueno de la vida porque es verdad, eres una persona valiosa que merece respeto y merece ser feliz solo por el hecho de ser un persona, solo por ser tú, creerlo es la base de una autoestima sana fuera de ansiedad.
Resumen
La depresión y la ansiedad van tomadas de la mano, pues no existe la depresión sin que me sienta mal con mi persona y no existe baja autoestima si no estoy triste por algo de mi ambiente o de mi vida que me está molestando.
Para saber qué grado de depresión presenta primero revise sus señales cuidadosamente y luego trate de analizar si lleva mucho tiempo estacionado en esos síntomas, puede ser ya no tan leve su enfermedad si lleva meses e incluso años en ese estado.
Una baja autoestima no se considera en éste momento como enfermedad, sin embargo, si se persiste en ese estado de ánimo por mucho tiempo, puede, además de perder confianza en sí mismo, ver su imagen propia disminuida creyéndose incapaz de hacer cambios, de tomar decisiones acertadas y de tener éxito en el futuro y con ello afectar negativamente su relaciones, su empleo, su vida entera, ya que se considera poco apto para la vida, la persona con baja autoestima descuida su salud y cuidados pues cree que no los merece, al sentirse indigno de amor y de respeto es el inicio de la depresión.
Cuidemos nuestro amor propio y nuestra autoestima y gozaremos de una salud mental equilibrada libre de ansiedad y depresión.
Por Yesenia Rojo M.